El creador de esta casta es José Rafael Cabrera, que aunque no fue el que formó la vacada fue el que perfeccionó la misma. El que la inició fue su suegro y tío segundo de este, de apellido también Cabrera, Luis Antonio, el cual adquirió reses bravas en 1740 a los frailes cartujos y dominicos de Jerez y Sevilla.
Estamos hablando de reses agresivas, poderosas y duras, que aguantaban muchas varas, correosas con ejemplares muy altos y cornalones. Estas características convirtieron a José Rafael en un ganadero de prestigio, tanto que José Vázquez las utilizó , junto a las suyas, para crear otra de las castas fundacionales de la cabaña brava.
José Rafael se casó en terceras nupcias con doña Soledad Núñez de Prado. Esta se quedó viuda, heredando todo incluso la ganadería. A su fallecimiento heredó la ganadería su hermana Doña Jerónima Núñez de Prado y al ser de avanzada edad confió la dirección a su sobrino Núñez de Prado, el cual en los años 1850 y 1852 vende la ganadería en dos partes a un sombrerero de Sevilla llamado Juan Miura.
En realidad se puede considerar el primer ganadero de esta familia fue su hijo Antonio Miura Fernández, para él que compró su padre la ganadería por su afición a los toros. Esta familia ya tenía algunas reses de casta Gallardo, con las que fueron mezcladas.
En la compra se determinó que primero serían cien vacas, y quinientas después. Era la sangre en la ganadería predominante aunque luego introdujera otras sangres.
Al poco tiempo se sustituyeron los sementales gallardos por dos de origen Vistahermosa adquiridos a Arias de Saavedra, procedentes de la rama del Barbero de Utrera.
En 1870 se produjo un cruce con la casta Navarra, al regalarle el diestro "Lagartijo" un toro indultado por él en la plaza de toros de Córdoba. Parece ser que a este animal le puso Miura un lote de setenta vacas que fueron cubiertas. Hay autores que hablan que aún corre sangre navarra por los toros miureños actuales.
También tenemos otro semental de origen vazqueño en Miura, concretamente un toro del Duque de Veragua. Parece ser que este animal murió pronto a resultas de la pelea con otro animal.
Para adaptarse a los tiempos la familia Miura acudió a la Marquesa de Tamarón para comprar un pequeño lote de vacas y un semental, de nombre "Banderillo", animales procedentes de la línea ibarreña. Este fue, que sepamos el último cruce en esta ganadería.
Morfología de las reses de Miura
Son los más altos de cuantos se crían en el campo bravo. La altura a la cruz es grande, zancudo y agalgado. Tiene gran desarrollo esquelético, con pesos entre los seiscientos y setecientos kilos.
Hocico ancho, ojos muy vivos, con encornaduras muy desarrolladas, con la particularidad de que el nacimiento de los cuernos es por detrás de la línea frontal, es decir, se dirigen primero hacia atrás y después se abren hacia afuera para terminar hacia adelante. Cuernos gruesos y también veletos, corniabiertos y capachos.
Su cuello es grande, flexible, musculado. Vientre recogido y extremidades delgadas y largas. Su pelo tiene una gran diversidad con predominio de negras, cárdenas, coloradas, castañas y tostadas.
Comportamiento
Suelen salir abantos, recelosos, tardando en fijarse en los toreros. En el primer tercio algunos son bravos y otros presentan mansedumbre. Entre lo uno y lo otro hay una amplia gama de graduación.
Durante los siguientes tercios suelen ser muy cambiantes. Toros que mansean en varas , mejoran y se entregan en la muleta, aunque siempre con dificultades.
En banderillas suelen ser muy complicados. Primero por la envergadura y segundo por la asombrosa soltura que tienen en el movimiento del cuello cortando la trayectoria y siendo muy peligrosos.
Muchos llegan a la muleta sin definirse, por los que los toreros deben estar muy hábiles para tener la maestría de someterlos en pocos muletazos. Si por el contrario, si se dan muchos pases de muleta aprenden pronto. Necesitan un torero con mucha técnica y decisión.
GANADERÍA MIURA
Continuando lo expuesto anteriormente al fallecimiento de don Juan, en 1855, se anunció a nombre de su viuda, y
de ésta pasó a su hijo mayor, don Antonio Miura, y a la muerte de éste,
en 1893, se hizo cargo su hermano don Eduardo, heredándola en 1917 sus
hijos don Antonio y don José, anunciándolo: “Hijos de don Eduardo
Miura”. A finales de 1940, don Antonio y don José se la cedieron a su
hijo y sobrino don Eduardo Miura Fernández. A la muerte de don Eduardo
Miura Fernández, en 1996, la heredan sus hijos don Eduardo y don Antonio
Miura, los cuales lidian a nombre de “Hijos de don Eduardo Miura”. En
2002 la ganadería pasa a anunciarse como “Miura”.
Divisa: En provincias verde y grana
Finca: Zahariche en Lora del Río
Procedencia: Miura
Representante: Antonio Miura Martínez
Antigüedad: 30/04/1849
Finca
'Zahariche' LORA DEL RÍO (Sevilla)
Antigüedad
30/04/1849
Con Eduardo Miura.
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